Nos quejamos de que el mal ha tomado una gran dimensión en todos los colectivos, pues se ha perdido la conciencia de pecado. Consecuencia de esto es el alejamiento de Dios. Nos hemos apartado de Él y vamos a nuestro arbitrio. La Virgen, que vivió tan unida a Dios, nos da el consejo para evitar todo esto, consejo que no podemos relegar: HACED LO QUE ÉL OS DIGA. Y sólo cuando hagamos lo que Dios nos dice, las cosas cambiarán. Mientras, el mal seguirá avanzando. Acatemos pues lo que la Virgen nos dice, Ella nos ayudará. contador de visitas

30 de noviembre de 2017

MI PADRE DESEA QUE NO OS FALTE NINGÚN MEDIO PARA SANTIFICAROS



Hijos del Dios Santísimo,  Me dirijo  a vosotros y deseo que recibáis estos mensajes con fe y amor, porque a quienes los pongan en práctica Yo le otorgo muchas gracias para ellos y su familia. Yo, Jesús, os hablo.

Mi Padre desea que os dé muchas gracias, que no os falte ningún medio para santificaros, por eso hijos, todos los que tenéis pruebas, enfermedades, trabajo, y demás, son medios que debéis emplear en santificaros y en ser un ejemplo vivo a quienes viven con vosotros y a los de vuestro entorno, que os vean como verdaderos cristianos y no pasando de todo y conformándoos con todo lo que no tiene que ver Conmigo.

Vuestro Padre Celestial no aparta Su mirada de vosotros pero a veces, y no pocas, ve cosas tan terribles que tiene que apaciguar Su ira para no enviar a la Tierra grandes castigos, porque os merecéis inmensos castigos de lo mal que guiais vuestras almas y de los malos ejemplos que dais incluso a vuestros familiares.

Os enfadáis por cualquier cosa y hacéis un mundo de ello. Tenéis que ser más tolerantes unos con otros, al demonio no le gusta que las familias se lleven bien y se ayuden mutuamente y por eso os mete la cizaña y muchos de vosotros caéis en sus trampas, y Yo os digo hijos, teniendo una Madre como la vuestra, Celestial, tan Santa y tan única ¿cómo podéis ser tan rebeldes tan malos y amaros tanto a vosotros mismos? ¿No os dais cuenta que Satanás lo que más desea es perderos eternamente y empieza por dividir a las familias, a las amistades, a los grupos de oración y a todo lo que pueda ser santo entre vosotros. Yo, Jesús, os hablo.

Termina ya el año y muchos lo tenéis en déficit, no habéis llegado al nivel que deberíais haber llegado. Empieza uno nuevo y seguiréis igual, criticando, murmurando, señalando las faltas ajenas. Pero hijos, no seáis así que Yo vine a la Tierra a salvaros y a enseñaros la verdadera doctrina que os llevará al Cielo y no al Infierno. Por tanto, haced propósito de enmienda. Confesaos hijos, confesaos.  No dejéis por mucho tiempo la confesión, que es un Sacramento que os da fuerzas y os santifica mucho, aunque vosotros no siempre lo notéis. Yo, Jesús, os hablo y os instruyo. Paz a todo aquel que crea y ponga en práctica estos mensajes.








No hay comentarios:

Publicar un comentario